Deja un comentario

The Bay of #Tweets: Documentos apuntan a la mano de #EstadosUnidos en protestas en #Cuba

Por: Alan MacLeod

Cuba fue sacudida por una serie de protestas callejeras contra el gobierno a principios de esta semana. El stablishment estadounidense inmediatamente elogió los eventos, poniendo todo su peso detrás de los manifestantes. Sin embargo, los documentos sugieren que Washington podría estar más involucrado en los eventos de lo que le importa divulgar públicamente.

Como muchos han informado , las protestas, que comenzaron el domingo en la localidad de San Antonio de los Baños en el oeste de la isla, fueron lideradas y apoyadas vocalmente por artistas y músicos, particularmente de su vibrante escena hip-hop.

“Para los nuevos en el tema de Cuba, las protestas que estamos presenciando fueron iniciadas por artistas, no por políticos. Esta canción ‘Patria y Vida’ explica poderosamente cómo se sienten los jóvenes cubanos. Y su lanzamiento fue tan impactante que irás a la cárcel si te descubren interpretándolo en Cuba ”, dijo el senador de Florida Marco Rubio, refiriéndose a una pista del rapero Yotuel.

 

Sigue leyendo


Deja un comentario

Guinness de #mentiras contra #Cuba

Foto: Pastor Batista Valdés/ Invasor.

Aunque no hay que ser experto para saberlo, analistas internacionales han demostrado que los disturbios de los últimos días en varias ciudades cubanas son parte de una gran operación, meticulosamente preparada desde el exterior, como expresión de la guerra no convencional que mantiene el gobierno de Estados Unidos, en contubernio con la extrema derecha anticubana radicada allí, para desestabilizar y derrotar a la Revolución.

Al brutal bloqueo económico, comercial y financiero, agravado a lo largo de seis décadas, con presiones y sanciones extraterritoriales de todo tipo para quienes le faciliten un grano de arroz a Cuba o reciban de ella la cabeza de un alfiler, la actual administración estadounidense sigue sumado fondos para promover la subversión interna en la Mayor de las Antillas, en un contexto en el cual emplea cada vez más las redes y plataformas digitales para crear confusión, desaliento y caos en la población.

De métodos diversos, unos solapados y otros francamente burdos, la política del imperio ha pasado a formas de injerencia y agresiones mediáticas, a la vista de una comunidad internacional cuya opinión y aplastante rechazo parecen no contar en organismos como la Organización de Naciones Unidas, cuya cadena de condenas al mencionado bloqueo pudiera inscribirse entre los más célebres récords Guinness del universo.

Golpes blandos que fracturan vértebras y médula espinal de gobiernos con orientación no grata a la mirada del todopoderoso y arrogante imperio, revolución de colores (estrategia silenciosa para derrocar gobiernos), intervención humanitaria (pantalla para ocupar militarmente y usar la fuerza) forman parte de los procederes de moda.

Foto: Pastor Batista Valdés/ Invasor.

De lo que se trata, nadie se llame a engaño, es de barrer con todos los proyectos anticapitalistas del planeta, y en este caso, con lo que representa el de esta nación, sostenido contra viento y marea en el transcurso de más de seis décadas, a pesar de los millones de dólares que se han invertido para subvertirlo.

Para muchos desinformados resultan desconocidos los hilos que mueven a elementos marginales y delincuenciales y hasta actores confundidos, y el objetivo supremo, para nada vinculado a garantizar alimentos y salud para este país, y mucho menos paz.

Pero esos hilos son cada vez más develados dentro y fuera del archipiélago. Alguien sin los conocimientos básicos sobre tecnologías digitales puede de todos modos entender lo que significa preparar un golpe mediático desde el exterior (Argentina, España, Estados Unidos…), como lo ha demostrado con pelos y señales el reconocido analista español Julián Macías Tovar.

Lamentablemente, lo que para la mayoría del pueblo cubano resulta más claro que el agua, es revuelto por la cuchara de los pusilánimes que, aun ni creyendo hacia dentro lo que sus ojos ven, se empeñan en hacer creer, hacia fuera, lo que desde el exterior les dictan para que repitan como papagayos.

De ahí viene esa turba, predominantemente jóvenes sin vínculo laboral, ricos en antecedentes penales y con pésima conducta, que salen a vociferar groserías, a lanzar piedras, a agredir a agentes del Orden Interior (o sea: a agentes del pueblo), decididos a saquear salvajemente, a matar si es preciso, y sobre todo a destruir la misma Revolución que les ha garantizado todos los derechos desde que sus madres los trajeron a este mundo.

Esos —con la mezcla de compasión que puedan generar los en verdad confundidos— devienen colaboradores del futuro que la extrema derecha anticubana de Miami y la Casa Blanca quieren pintarnos y regalarnos envuelto en servilletas de color gris.

Lo que ocurrió el pasado domingo es la “tranquilidad ciudadana” que para Cuba entera reservan quienes nos odian a muerte. Eso es lo que nos espera en caso de arrodillarnos. Solo que esto último —y allá en el norte lo saben muy bien— nunca va a suceder.

Foto: Pastor Batista Valdés/ Invasor.

(Tomado de Invasor)