Por Agustín Palermo (*)
El periodista cubano Edmundo García, que dirige el programa radial alternativo “La Tarde Se Mueve” en Miami, acaba de publicar un trabajo periodístico extraordinario. Resulta que el pasado mes de agosto viajó a Cuba y entrevistó a un grupo de “opositores”, que estaban vinculados a postularse a las elecciones del Poder Popular que se celebra en octubre en la Isla. Recorrió desde Ciego de Ávila hasta Pinar del Río y realizó diecisiete entrevistas; sus interlocutores fueron personas que “trabajan” en la base así como los propios dirigentes. Las entrevistas se encuentran en el canal de YouTube, con el siguiente nombre: Edmundo W García.
América Latina, por más de cinco décadas ha escuchado la voz del mandamás del Norte, vociferando que en Cuba no hay democracia ni elecciones libres ni se respetan los derechos humanos. Por supuesto que en la revolución cubana no existe ni existirá la democracia que Estados Unidos impone en el mundo, y por eso sufre injustamente el cruel y criminal bloqueo económico, comercial y financiero.
En 1994 -en pleno periodo especial-, Fidel, refiriéndose a la democracia estadounidense contó que “un señor se había gastado 25 millones de dólares en una campaña para ser miembro del Congreso”, y preguntó “¿Qué democracia es esa? ¿Cuánta gente tiene 25 millones de dólares para gastárselos en una campaña? Y en Cuba no necesita gastar ni 25 dólares, tal vez el pasaje para ir a votar el día de las elecciones tenga que gastarse el ciudadano”. Ese modelo de democracia de los Estados Unidos, es el gobierno de los ricos, con los ricos y para los ricos; ahí el pueblo no participa y tampoco está representado; a eso llaman elecciones libres y es eso lo que pretenden que se replique en todos los países.
Las entrevistas tienen gran valor, porque sin proponérselo, los mismos “opositores” al participar como candidatos le están diciendo a su amo de la Casa Blanca, que en Cuba sí hay elecciones y más libres todavía, porque ahí no se necesita ser millonario para elegirse, y nadie les ha impedido participar. Sin embargo, el pueblo cubano -y esos “opositores”- saben, que una cosa es tener la oportunidad de ser candidato y otra muy diferente es tener alguna posibilidad de ser elegido. Cuba jamás va entregar las banderas del socialismo a sus enemigos, de modo que esa llamada “disidencia” no tiene ninguna probabilidad de ser poder en Cuba. Además, las entrevistas ponen al descubierto quiénes son los “opositores”: gente con escasa formación política y educativa, viven enfrentados entre ellos, corruptos, mentirosos, con antecedentes delictivos, que se convierten en “disidentes” para recibir dinero, cámaras, laptop y celulares, y son completamente desconocidos en sus propias comunidades. Lo cómico en algunos casos es que no faltan quienes se están postulando y al mismo tiempo están haciendo los trámites para emigrar. La mayoría de los entrevistados se expresan muy mal de Berta Soler, Jorge Luis García Pérez “Antúnez”, Antonio Rodiles, José Daniel Ferrer, Elizardo Sánchez, Martha Beatriz Roque entre otros, por corruptos y vividores, que se quedan con el dinero enviado desde los Estados Unidos para agitar la subversión.
Mientras fuera de Cuba agrupaciones como la Muad o Plataforma “Otro 18” reciben gran propaganda, los propios “opositores” despotrican contra ellos, diciendo que son proyectos que nacieron muertos. Y no podía faltar, y lo dicen ellos mismos: es la The National Endowment for Democracy (NED) de los Estados Unidos, quien financia a todos esos traidores a la patria.
¿Con ese tipo de gente estará acaso en peligro la revolución? ¿Cuánto desvelo le pueden traer a la dirección política de Cuba? Ninguna. Razón tenía Ernesto Guevara cuando dijo: “No se puede confiar en el imperialismo, ni un tantito así, ¡nada!
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